En México “No pasa nada”

14 de diciembre de 2004



Seguramente ya usted fue testigo de la última gran campaña en radio y televisión que el gobierno federal tiene al aire desde hace varias semanas; campaña con una pauta muy intensa y que seguramente a los mexicanos nos está costando mucho dinero; campaña que en su mensaje central exhibe lo que seguramente las encuestas les señalaron a los estrategas del presidente Fox sobre lo que piensa la mayoría de los mexicanos: “en este gobierno no pasa nada”.

La semana pasada el presidente Fox ofreció una rueda de prensa a corresponsales extranjeros y al señalamiento de que “huele a 1994”, el presidente contestó con un excesivo optimismo, como es su costumbre, que refleja el ficticio país donde él vive, señalando que “el proceso electoral del 2006 en México va extraordinariamente bien, no podía ir mejor” y “las instituciones en México están operando y están operando muy bien”: que gran mentira.

Según el Presidente “no pasa nada”; no se ha percatado del gravísimo deterioro que han tenido las instituciones, de la agravada violencia social que se expresa en todo el País, del cotidiano desafío de los narcotraficantes y el lamentable y peligroso disturbio político; por el contrario, Fox observa un fortalecimiento de las instituciones y una sucesión presidencial ordenada.

Fox tiene razón al afirmar que en México “no pasa nada” y como ejemplo podemos señalar que: el gobierno federal quería una ley indígena que garantizara la paz en Chiapas, “no pasó nada”; el gobierno pretendía realizar la política pública más importante del sexenio construyendo el nuevo aeropuerto internacional, “no pasó nada”; pretendió castigar a los responsables de la Guerra Sucia, “no pasó nada”; quiso implementar una lucha frontal en contra de la corrupción, “no pasó nada”.

Lo que sí es un hecho es que día con día gana más y más consenso el tema de que en México, con éste gobierno, “no pasa nada”. El consenso que con los hechos ha generado la percepción entre ciudadanos y gobierno, partidos políticos y organizaciones civiles, organismos internacionales y gobiernos de otras naciones, no requiere de su difusión en los medios de comunicación puesto que el público al cual esta dirigido el mensaje y que lo recibe ya tiene conocimiento y coincide con que en México “no pasa nada”.

Es ofensivo que el presidente Fox autorice una campaña en medios tan intensa que nos hiera al reiterarnos cada día, cada hora y minuto que en México “no pasa nada”.

Por último, ayer se inició el término de 72 horas en el diferendo entre el presidente de la República y la Cámara de Diputados. En la última sesión celebrada en la Cámara de Diputados se votó la posición de la mayoría frente al veto presidencial y fue rechazado, lo que abrirá la puerta a la controversia constitucional.

Como en todas las ocasiones anteriores en que el presidente Fox ha intentado impulsar un tema, seguramente lo operará de forma desafortunada y saldrá con una nueva campaña en los medios de comunicación que señale: en México “no pasa nada”.