La tercera crisis en Jalisco

23 de mayo de 2009



Es evidente que las campañas políticas para la elección de presidentes municipales, diputados locales y federales han sido complicadas por la nueva regulación electoral. Es más que evidente que a la mayoría de los ciudadanos no les atraen las acciones de promoción del voto que realizan los Partidos Políticos y sus candidatos, lo cual es verdaderamente lamentable en una sociedad democrática. Pero es mucho más evidente que, en el proceso electoral en Jalisco, se está gestando una crisis política y de legitimidad para el Gobierno del Estado, propiciada por su propio titular.

No es cosa menor que Emilio González Márquez haya retado a los Partidos de oposición y al propio Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) mediante la salida al aire de un spot en televisión, en el que aparece a cuadro el propio González Márquez, y donde, con su voz, informa sobre la influenza.

No es cosa menor porque contraviene a la Constitución, en el octavo párrafo de su Artículo 134 que a la letra señala: “La propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan como tales, los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno, deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social. En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público.” además de generar inequidad y dar argumentos para la inconformidad y el enfrentamiento político, que es lo que menos queremos los ciudadanos en Jalisco, lo que el gobernador ratifica es su desprecio por la legalidad.

No conforme con su spot en televisión, también se difunde en radio e internet. Es claro que su objetivo principal no es informar a la población sobre un tema de salud, su principal objetivo es electoral; podemos utilizar como analogía al Gobierno de Felipe Calderón, que ha realizado una campaña de información para la prevención y control de la influenza plenamente institucional, en ningún momento con la imagen o voz del presidente.

Emilio González está jugando con fuego; si bien es cierto que su publicidad será contraproducente para los candidatos de su Partido, ya que su imagen y su voz nos recuerda la etílica mentada de madre a los que no pensamos como él, nos remite a los donativos millonarios para templos, novelas y eventos sociales, así como a su irresponsabilidad para enfrentar a la influenza, también lo es que está generando una terrible crisis política poselectoral que en nada beneficia a los jaliscienses.

El gobernador, nuevamente, demuestra su personalidad frívola, autoritaria y demagógica, así como su actitud irresponsable al retar a todos mediante la ilegalidad; no es posible que un gobernador haga caso omiso a una solicitud del máximo órgano electoral en el Estado; no se puede pensar que Emilio González vaya a actuar de manera responsable durante el resto del proceso electoral, eso está más que demostrado.

Gracias al gobernador, en Jalisco tendremos una tercera crisis; primero la económica, que afecta a todo el país con desempleo y disminución del poder adquisitivo de los Jaliscienses; en segundo lugar, la de seguridad, ya que Jalisco se convirtió en un Estado violento donde se han incrementado los asesinatos, robos y secuestros de manera alarmante; ahora, gracias a Emilio, tendremos la tercera crisis, que será política.